Bueno, bueno, todos sabemos que las ambulancias son para urgencias y por eso tienen intermitente y sirena, pero el canto de la sirena del MINSA y el MEF de que el asunto es tan urgente que no importa el rosario de fallas del contrato directo no convence ¿o si?
Por cierto que incluso, independientemente de que no presentan solvencia económica ni tiene talleres para la misma aquí, o de que la empresa se formara hace poco y que en el contrato de almuerzaso, perdón, el CENA se tragaran, luego algunas cláusulas, resulta que la susodicha empresa dio como oficinas un local que desde hace 15 años ocupa una empresa que no tiene relación alguna con ella. O sea, que los contratistas ni siquiera conocen su propia dirección ¿o no?
De paso también hay otro asuntillo donde la exlucinda del Nomeduca suspendió a una empresa que la anterior administración adjudicó para trabajos en sede del ministerio por millón y cuarto de balboas y luego se lo concedió en forma directa a otra empresa por mas dinero, casi un millón 400 mil tucos, que supera incluso en mas de 200 mil billetes el presupuesto del propio ministerio.
Pero eso no fue lo que le contesto al Juan Carlos.
Lo cierto a que en sus tres primeros mes el actual gobierno no han hecho una sola licitación, ni concurso de precios y ya lleva 120 millones en contrataciones directas.
Un ejemplo es lo del hospital pacoreño donde dicen que una de las empresas beneficiadas tiene serios problemas legales en el exterior.
El ministro mefioso, como excusa, ademas del gobierno de urgencia notoria, tiene prueba de contratos del gobierno anterior por 100 millones que no cumplieron con lo dispuesto por la ley de contrataciones.
O sea que parodiando su slogan podríamos decir: ¡Ahora le toca al cambio!
Tal vez por ello insisten en cambiar (recuerden que son cambiantes) la famosa ley de contrataciones públicas.
Bueno eso es todo por hoy pero tranquilos que mañana habrá mas.
Por cierto que incluso, independientemente de que no presentan solvencia económica ni tiene talleres para la misma aquí, o de que la empresa se formara hace poco y que en el contrato de almuerzaso, perdón, el CENA se tragaran, luego algunas cláusulas, resulta que la susodicha empresa dio como oficinas un local que desde hace 15 años ocupa una empresa que no tiene relación alguna con ella. O sea, que los contratistas ni siquiera conocen su propia dirección ¿o no?
De paso también hay otro asuntillo donde la exlucinda del Nomeduca suspendió a una empresa que la anterior administración adjudicó para trabajos en sede del ministerio por millón y cuarto de balboas y luego se lo concedió en forma directa a otra empresa por mas dinero, casi un millón 400 mil tucos, que supera incluso en mas de 200 mil billetes el presupuesto del propio ministerio.
Pero eso no fue lo que le contesto al Juan Carlos.
Lo cierto a que en sus tres primeros mes el actual gobierno no han hecho una sola licitación, ni concurso de precios y ya lleva 120 millones en contrataciones directas.
Un ejemplo es lo del hospital pacoreño donde dicen que una de las empresas beneficiadas tiene serios problemas legales en el exterior.
El ministro mefioso, como excusa, ademas del gobierno de urgencia notoria, tiene prueba de contratos del gobierno anterior por 100 millones que no cumplieron con lo dispuesto por la ley de contrataciones.
O sea que parodiando su slogan podríamos decir: ¡Ahora le toca al cambio!
Tal vez por ello insisten en cambiar (recuerden que son cambiantes) la famosa ley de contrataciones públicas.
Bueno eso es todo por hoy pero tranquilos que mañana habrá mas.
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